La Crazy Gang
La Crazy Gang del Wimbledon
El Wimbledon FC nació profesionalmente en 1977, previamente había sido un club amateur fundado en 1889. Esta es la historia de un equipo que, con un fútbol basado en la intimidación, consiguió llegar a la élite más alta del fútbol inglés.
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Cuando el Wimbledon llegó a la Primera División inglesa (1986-87), era considerado un equipo menor por la mayor parte de la prensa, sin embargo, esa temporada consiguieron quedar sextos en liga y llegaron a estar en puestos altos durante algunos tramos de la temporada.
La Crazy Gang comienza en la temporada 1987-88. Recibe este nombre porque se junta un grupo de jugadores y entrenador que parecía que se tomaban el fútbol de una forma poco seria y deportiva, eran como un grupo de amigos que jugaba el partido de los domingos.
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La prensa bautizó su juego como (kick and rush), que consiste en dar un balonazo al delantero y que pase lo que tenga que pasar. A simple vista, parece un fútbol poco elaborado, sin embargo, hay que saber cómo jugarlo para conseguir grandes logros. La otra base de este equipo es la forma de defender, consistía en intimidar constantemente al rival cuando el árbitro no mirase, mediante insultos, pinchazos, pataditas a destiempo, etc.…
En esta imagen vemos claramente al central y líder, Vinnie Jones, “intimidando” a uno de los mejores jugadores de la época, Paul Gascoigne.
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Era un fútbol distinto que conseguía sacar a los rivales del partido y tenerlos con miedo los 90 minutos. Quizá pueda parecer que este comportamiento está fuera de lo deportivo, sin embargo, el fútbol de estos muchachos no es más que llevar al límite el reglamento. Los defensas y el bloque de centrocampistas realizaban entradas al balón, pero con una dureza y fuerza que alarmaba a los rivales, de vez en cuando con algún grito incluido.
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Otra de las piezas claves de este equipo fue el gran Dennis Wise, un viejo conocido de la Premier League por su dureza e intensidad en la década de los noventa.
El mayor logro de esta Crazy Gang llegaría en el año 1988, tras plantarse en toda una final de FA CUP, en el viejo Wembley. Esta final fue contra el mismísimo Liverpool, recordemos que llegó a varias finales de Copa de Europa en esa década. El partido transcurrió al ritmo del Liverpool, que jugaba un fútbol rápido y ofensivo. Sin embargo, el Wimbledon aguantó bien las ofensivas del Liverpool y se encontró con un gol de cabeza en el minuto 37 de Lawrie Sánchez, a partir de ahí, el partido fue una guerra total, los jugadores del Wimbledon insultaban por cada acción a los jugadores del Liverpool, hacían entradas a destiempo, por cada jugada se perdían 3 minutos, el portero de los Dons paró un penalti… Hasta que llegó el pitido final y ese fútbol poco vistoso pero muy eficaz para un equipo humilde, se llevó el premio de ganar una FA CUP.
Por cosas de la vida, no pudieron jugar la Recopa de Europa debido a la sanción que tenía el fútbol inglés por la tragedia de Heysel.
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Este fue el mayor logro de nuestros muchachos, comandados por 5 tipos duros que contagiaban la intensidad que hace ganar partidos.
Evidentemente, no todo el mundo era amigo de este juego, ahí encontramos la famosa frase de Gary Lineker sobre el Wimbledon: “La mejor forma de ver al Wimbledon es por el teletexto”. Yo personalmente considero a este Wimbledon un grupo de héroes para esa pequeña zona del sur de Londres y para sus aficionados. No es el mejor ejemplo de representar la deportividad del fútbol, pero es la demostración de que existe un fútbol distinto, que no tiene mucha vistosidad ni demasiada preparación táctica, sin embargo, lo considero un fútbol más mental en el que entra en juego la capacidad de intimidad al rival llevando al límite el reglamento.
Hasta aquí esta historia de un equipo de tipos duros, un fútbol no apto para cobardes ni señoritos, aquí se bajaba al barro, conseguías el 1-0 y a casa. Todo un logro para un grupo de jugadores que ni de lejos tenían el nivel técnico ni táctico para jugar en Primera División y que a pesar de ello, dieron la cara y consiguieron grandes cosas.
Womble till i die!
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InfraFútbol
